¿Y si te abraso?
Digamos que un día al azar me acerco sigilosa y te abrazo con cada uno de mis átomos y todos arden y quedas así abrasado a mí. Convierto en cenizas tus miedos y quizás ves el futuro que podríamos tener. Las posibilidades parecen finitas pero me haces olvidar los límites y querer lanzarme al abismo que en realidad no existe.
Lo cierto es que no me gusta la espera porque implica riesgos, implica que nos vemos distinto pero como paso del frío al calor y en momentos así soy sólo intuición quiero creer y creo que puedo esperar y que a fin de cuentas, no es tan malo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario